Superposición del sitio

El cliente tarjetero.

pizzeria lucciana orihuela

Tarjeta Roja…

Como éste camarero se reserva el derecho a réplica en aquellas reseñas donde se miente con descaro hago la siguiente reseña a éste cliente que cuenta verdades a medias. Aclaro que no es una nueva justificación o intento de hacer entrar en razón al comensal en cuestión, eso ya lo intenté con el resultado que aparece en la reseña de la izquierda. Aclaro también que el siguiente contenido es a titulo personal donde nada tiene que ver la dirección de la pizzería, y dado que me encuentro fuera del horario laboral nada podrá ser reprochado a la misma.

Pues esto es la Historia de unos clientes colaboradores, amables y sin mas reseñas destacables, me llamaron porque querían cenar ya llevaban un tiempo ocupando una mesa doble mientras tomaban unos aperitivos y bebidas. Les reacondicioné la mesa y se la preparé para la cena, entiéndase, manteles, cubiertos etc…les tomo nota de todo y nada ¡a cenar se ha dicho!

Como bien dice el creador de la reseña todo estuvo bien, hasta que llegó la hora de pagar. me piden la cuenta y yo la llevo a la mesa y también piden pagar con tarjeta, fíjense bien, ¡me piden la cuenta no las cuentas!

Llevo la cuenta y entonces me piden pagar en tres pagos, yo les digo que no puedo hacer tres pagos de una cuenta porque desde la dirección me lo prohiben, uno de los comensales muy amable el, me dice que le cobre y eso hago, pero ¡ay amigos! ahora empieza lo bueno, un señor mas o menos de mi edad me recrimina, ¡si, me recrimina a mi! que soy un camarero a sueldo y que solo intento cumplir con lo que se me manda, que no veía bien el hecho de no poder pagar en varias veces una cuenta, cuando se dio cuenta de su error entonces espetó ¡es una falta de respeto a los clientes por parte del jefe!

¡Ay amigos…! por ahí si que no, ¿Qué tu vas a decir que en esta pizzería se le falta el respeto a los clientes? ¿Y en mi cara? pues va a ser que no, y fijaos amigos que dejo todo, la atención a los demás clientes que esperaban la cena, todo el trabajo que conlleva estar en una terraza con casi cuarenta mesas, lo dejo todo para explicarle al cliente tarjetero el porque son las cosas en esta pizzería. A medida que le iba dando explicaciones su ira iba en aumento (algo debo estar haciendo mal), cambio de estrategia, le doy otra explicación, su ira no se aplaca, le doy otra explicación mas y entonces me dice que yo tambien le estoy faltando al respeto…¡oiga! créaselo, y yo que esperaba que me agradeciera el hecho de estar alli dando explicaciones, toma ya. Aun con todo eso le digo:

«Si usted cree que yo le he faltado al respeto por las explicaciones que le he dado le pido disculpas» ¿»Me acepta las disculpas?»

«¡Si!, ¡no! »

O sea, primero dijo si y después que no, claro que esto lo olvida poner en la reseña, no vaya a ser que quede mal…

Es cierto que alguien en la mesa dijo que no volviera mas a la pizzería, ¿sabeis quien lo dijo? pue EL…

«Vale, tu jefe tiene como opcion no dividir los pagos de las cuentas, y yo tengo la opción de no volver mas a este local»

A lo que yo contesté…

«Pues tiene usted la razón, usted puede optar por no volver más»

Toda la mesa incrédula ante semejante postura irracional de enfrentamiento con un camararo a sueldo, en ningún momento dijo eso de «quiero hablar con el jefe» y haberse entendido con el, porque ¿Qué carajos pinto yo en semejante embolado?

En seguida noté que a este señor lo que le fastidiaba era el hecho de no decirle a todo que si, no que no le hiciera tres cobros por una cuenta de 90 euros que, por cierto, fueron 90 euros en bebidas, aperitivos, cenas y demás PARA 7 PERSONAS…

Oiga, si usted busca un trato donde se le diga a todo que si, donde se le permita cambiar las normas de un local entre otras, ¡váyase a un buen sitio, pague a 100 euros el cubierto y verá que allí el trato es tal y como usted quiere, aqui somos una pizzería donde damos de cenar intentando que todo salga bien, pero también tenemos normas, y desde el momento en que usted se sienta en una silla y hace uso de la terraza y del personal está aceptando esas normas, y si no, tenia la opción de haberse informado primero si lo que pretendía hacer usted de hacer de una cuenta tres pagos era viable, le habrían dicho que no.

Fui cuidadoso y comedido en mis respuestas a este cliente, toda la mesa lo escuchó y comprobó, pero el andaba buscando una reacción por mi parte que nunca se produjo y de ahí su frustración, ahora que, como dije mas arriba, no estoy en horario laboral ni hablo en representación de nadie es cuando le hablo de tu a tu, un cliente que miente descaradamente a sabiendas que quien dijo de no volver mas a la pizzería fue EL, tal vez buscando la reacción del jefe para que me sancionara, despidiera o que se yo, pues amigo, su reseña es difamatoria al camarero al que alude, que soy yo, y en consecuencia susceptible de ser denunciada porque busca hacer daño con los comentarios vertidos en ella, así pues, piénselo bien antes de seguir metiéndose en un tema que puede ser una espina clavada en su pie. Porque como me de por denunciar, no a Google, si no a las Autoridades competentes en delitos telemáticos se va a encontrar inmerso en un grave problema.

Les dejo a continuación la reseña publicada el Domingo en la noche por esta persona…

Hemos ido a cenar con unos familiares, el servicio en principio ha sido correcto y la comida estaba rica. El problema ha surgido cuando queríamos pagar la cuenta en tres partes con tarjeta de crédito. La cuenta ha ascendido a 90 €. Se han negado a hacerlo como queríamos diciéndonos que eran normas del jefe y ellos no podían hacer nada. Si el comentario del camarero se hubiese quedado ahí, no estaría de acuerdo pero lo asumiría. Simplemente le he hecho saber mi malestar por la situación y entonces empieza a intentar justificar una postura que no tiene justificación, con argumentos como que el ordenador no admite está circunstancia, que si todo el mundo de la terraza paguese de esta forma que iban a hacer ellos, insinuando que si no me gusta su forma de hacer las cosas que no vuelva. Evidentemente no pienso volver y además publicitar el mal gesto que han tenido con nosotros. En un momento donde te tomas un café por 1,10 € y lo pagas sin problemas con tarjeta, me quieren justificar que no puede aceptar tres pagos de 30€. Lo dicho vergonzoso y no vuelvo más.

Mire señor, lo vergonzoso es pagar 1 euro con diez céntimos con una tarjeta…

Primera explicación que le doy al este cliente:

«No puedo dividir la cuentas porque desde la dirección me lo impiden» No lo acepta…

Segunda explicación:

«Si todas las mesas quisieran pagar así imagínese el problemón que supone estar sacando cuentas, dividir y demás, y encima las comisiones por uso del tarjetero» No la acepta…

«El TPV que gestiona las mesas me impide dividir cuentas, en el tpv es una mesa una cuenta, no varias cuentas» No la acepta y es ahí cuando me dice que le estoy faltando al respeto.

Mire, al respeto se falta a si mismo cuando reacciona de esa manera con un trabajador que está hasta los mismísimos de aguantar chorradas varias,.

El respeto se falta a si mismo cuando miente con descaro y sin ruborizarse con la única finalidad de hacer daño a esta pizzería y a este camarero.

Y ya solo me queda decir…

Si usted reconsidera su difamatoria reseña y la elimina yo también eliminaré esta reacción.

Chema, el camarero que le atendió…

 

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